El Mercedes 190 SL es un ejemplo perfecto de cómo escuchar las opiniones. Tras la presentación del 300 SL, un importador americano de Mercedes se dio cuenta de que, aunque había mucha gente interesada, el 300 SL seguía siendo demasiado caro para lo que la mayoría quería gastarse en un coche de fin de semana. Tras una llamada a Alemania, todo se aceleró; ese mismo año, el 190 SL (basado en el Ponton) se exhibió en el Salón de Nueva York. Un año después, la versión de producción estaba lista en Ginebra. Sorprendentemente; no como un deportivo, sino como un cómodo biplaza. Se convirtió en un gran éxito, de 1955 a 1963 más de 25.000 190 SL salieron de la cadena de montaje en Alemania.
Nuestro 190 SL es de 1962 y se entregó originalmente en Francia. Allí el coche permaneció en la familia hasta el año 2000, cuando el último propietario holandés lo compró. Allí el Mercedes recibió lo que se merecía; una completa restauración y puesta a punto, que por cierto está totalmente documentada y fotografiada. Una vez finalizada la restauración en 2002, el coche se utilizó como coche de vacaciones. No se puede empezar las vacaciones mucho mejor que así, quitar la capota y con el gran volante blanco y el viento en el pelo ¡estás conduciendo por la costa! El interior de cuero rojo sigue siendo original y tiene algo especial; ¡un tercer asiento! Detrás de los asientos delanteros hay un tercer asiento "inclinado", ¡donde podrás disfrutar aún más de tu entorno!
El 190 SL está en buenas condiciones de conducción, sin embargo, no es un coche concour. ¡La técnica ha sido completamente revisado durante la restauración, por lo que está listo para muchos más kilómetros de disfrute de la vida! ¡Si desea conducir sin culpa hacia el Paso Stelvio, este es el coche para usted!