Has comprado un Fiat, pero lo conduces como un Ferrari -
Nos gustaría pedirle que se quite las gafas de color Multipla. Sí, ¿podemos? El Fiat Dino. Nacido de la necesidad. Sinónimo de mucha emoción, de despedida, de bellas formas y ahora, afortunadamente, un coche cada vez más apreciado. Dino hace referencia a Alfredo Ferrari, hijo de Enzo. Alfredo desarrolló desde su lecho de enfermo motores V6 que acabarían sirviendo en un coche de Fórmula 2. Por desgracia, sufría una rara enfermedad muscular que no le permitió ver el final del proyecto. Ni siquiera para oír funcionar el primer motor. A los 24 años, la pasión perdió ante la salud. Pero inició un legado, ¡héroe!
Como homenaje a su hijo, Enzo decidió retomar sus motores y seguir desarrollándolos. Cuando la FIA endureció las normas en el 67, fue una gran oportunidad para Enzo de producir el motor a una escala ligeramente mayor. Había que fabricar un mínimo de 500 unidades para la calle, después de lo cual el motor sólo podría utilizarse en circuito. ¡Gracias FIA!
Naturalmente, las dos grandes marcas italianas (Fiat y Ferrari) se pelearon por el lugar de montaje. ¿La solución? Ambos construimos nuestro propio Dino, con el mismo motor. ¡Encuentra el modo de hacerlo! En efecto, ¡averígualo!
Y así nació nuestro Fiat Dino 2000 en Turín, con los colores actuales. Diseñado por Pininfarina, con guiños evidentes a su hermana Ferrari. Por ejemplo, tras horas de mirar enamorado, reconocí claramente el trasero del Daytona, los pasos de rueda altos y la "parrilla en forma de caja de huevos".
Y luego el nuestro. Una de las 1163 unidades jamás construidas, originalmente en 'Verde Scuro', del segundo propietario. El primer propietario lo tuvo durante 51 años. Y entendemos por qué. Cuando la Olio está en temperatura, la aguja pasa de 4000 y dejas que chisporroteen los 160 caballos de espresso; ¡sonrisa y piel de gallina garantizadas! Esta es una con auténtico ADN de competición, en una chaqueta simpática. ¿Podemos verla pronto?
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- Fiat Abarth