- Elegancia refinada y rendimiento en bruto, en topless. -
Con un estilo que atrae todas las miradas, pero a la vez es caca-chic y no pasa desapercibido en la entrada de casa de los suegros. En la mayoría de las cosas, sólo un poco diferente de lo que estás acostumbrado, de una manera muy agradable. BMW decidió, al igual que hizo Porsche con el Boxster y el Cayman, presentar primero la Serie 6 como descapotable. Y lo entendemos, porque qué bonita es, en topless....
Este es, en nuestra humilde opinión, uno de los últimos coches de verdad. Un coche que te proporciona tu kilometraje diario, mientras que lo realmente imprudente permanece dormido en el granero. Entonces, ¿haces concesiones? Pues no. Con el Dynamic Drive Control cambias entre Confort, en el que te deslizas de maravilla y la suspensión filtra todos los baches por ti. En cuanto te dejas seducir por el modo "Sport", todo se pone al límite. Los contadores pasan a rojo intenso, el seis cilindros en línea de 3.0 litros con tres propulsores fuerza 320 CV a las ruedas traseras con dos dedos de frente. En 5,7 segundos hasta el -yo-tendré-, eso sí, sin techo.
Según BMW, este nuevo 6 es un 50% más rígido que la generación anterior. Por lo tanto, el comentario generalizador sobre el manejo de un descapotable, pertenece claramente al pasado. Y luego unas palabras sobre el techo; hasta 40 km/h se abre y se cierra. Algo para regalarse unos rayos de sol, en un atasco en la A1. Y luego sobre las opciones; el primer propietario era claramente alguien sin concesiones; todas las opciones (¡!) están presentes. La refrigeración de los asientos, la calefacción, Harman&Kardon, las cámaras por todas partes y la amplia pantalla multimedia no son imprescindibles, pero lo completan. Concesionario mantenido, 31 mil kilómetros recorridos y completamente libre de daños. Esto es -M-.
- Este es el único ROARRRRRRDSTER adecuado para los caballeros que son demasiado jóvenes para un Jaguar -