En 1948, el primer prototipo del Porsche 356 vio la luz. Refrigerado por aire, ligero y de líneas afiladas. Sin excesos. Sin concesiones. Sólo ingeniería pura y atemporal.
En 1955 llegó el 356A, una evolución refinada basada en el mismo ADN inconfundible de Porsche.
¿Y el nuestro? Un ejemplo raro y excepcional.
Acabado en el original e irresistiblemente elegante Graphite Metallic (5603) con interior de cuero rojo - una combinación de colores tan única, que es poco probable que la vuelvas a ver. No se trata de una especificación elegida de un catálogo. Esto es artesanía.
Totalmente restaurado en Italia, hasta el más mínimo detalle. Todo está alineado, desde los embellecedores hasta las costuras del cuero. Por supuesto, viene con números y colores a juego, y es Mille Miglia-elegible.
Para una conducción más enérgica, actualmente está equipado con un motor 356 mejorado de 90 CV: la mezcla perfecta de autenticidad y potencia extra. Totalmente reconstruido en 2017. ¿Prefieres la originalidad total? Se incluye el bloque motor original.
Desde su llegada a los Países Bajos, este coche ha sido perfeccionado por auténticos entusiastas. Cada tornillo inspeccionado, cada kilómetro un tributo a la precisión. Este no es el tipo de Porsche que se ve aparcado en la puerta de un café. Este es un Porsche para unos pocos exigentes: aquellos con gusto, pasión y un profundo aprecio por la historia.
Así que abróchate el cinturón. Gira la llave. Escuche. Disfrute.
“Uno no encuentra un coche así: el coche te encuentra a ti”.